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Osmosis MiniMax 75 - GrowMaxWater
El MiniMax 75 es un sistema de ósmosis inversa diseñado para hidroponía y jardinería, ideal para quienes buscan agua pura y libre de contaminantes para sus cultivos. Este sistema compacto produce hasta 250 L/día (máximo de 10 L/h), brindando un suministro constante y de alta calidad.
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Beneficios del MiniMax 75:
- Elimina hasta el 95% de sales y metales pesados.
- Reduce el pH y la EC del agua, mejorando la eficiencia de los fertilizantes.
- Elimina hasta el 99% de cloro y sedimentos de hasta 5 micras.
- Protege los microorganismos beneficiosos del suelo y evita el exceso de nutrientes.
- Mejora el rendimiento de tus plantas, brindándoles un agua más pura y saludable.
- Elimina o reduce: Sales, metales pesados, cloraminas, nitratos, nitritos, sedimentos, herbicidas, pesticidas, y contaminantes orgánicos volátiles como benceno y aceites. Además, elimina hasta el 99% de cloro, ideal para un agua de riego perfecta.
Incluye:
- Conexiones para grifo de jardín y grifos interiores.
El MiniMax 75 es la solución ideal para quienes necesitan un sistema de ósmosis inversa confiable, compacto y eficiente para sus cultivos.
¿Por qué debemos evitar el cloro en nuestra agua de cultivo?
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Impacto en la microbiota del suelo: El cloro es un desinfectante que puede eliminar bacterias y hongos benéficos en el suelo. Estos microorganismos son esenciales para la descomposición de la materia orgánica y la disponibilidad de nutrientes para las plantas. Al destruirlos, se interrumpe el ciclo de nutrientes y se compromete la salud del suelo y de las plantas.
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Daños en las raíces: El cloro puede causar daño directo a las raíces, afectando su capacidad de absorber agua y nutrientes de manera eficiente. Con el tiempo, esto puede llevar a un menor crecimiento de la planta y una reducción en el rendimiento de los cultivos.
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Afecta la absorción de nutrientes: El cloro puede interferir en la capacidad de la planta para absorber ciertos nutrientes, como el nitrógeno y el fósforo, elementos clave para el desarrollo y la floración de las plantas. Esto puede resultar en deficiencias nutricionales visibles como clorosis o crecimiento atrofiado.
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Ajuste del pH del suelo: El uso constante de agua con cloro puede alterar el pH del suelo, haciéndolo más ácido o alcalino dependiendo de las condiciones locales. Esto puede tener un impacto negativo en la disponibilidad de nutrientes y la estructura del suelo.